Detenido por desobediencia grave y lesiones

La actitud ante las policías que actuaron fue violenta y amenazante

Fue necesario trasladarle hasta las dependencias policiales para conseguir su identificación

Palma, 26 de julio de 2024.- Hacia las 05:15 horas de día 25 de julio, una dotación de la Unidad de Seguridad Integral (USEI) que patrullaba por la calle Cartago, fue requerida por un turista de 19 años y nacionalidad neerlandesa, que en inglés, las manifestó que momentos antes un individuo muy violento le había dado un puñetazo en la cara sin motivo, mostrando unas lesiones a la altura del ojo izquierdo.

Mientras las explicaba los hechos, señaló a una persona que iba andando a unos metros de distancia como el agresor. Inmediatamente, las policías se dirigieron y lo requirieron para que se identificara y diese su versión.

Esta persona manifestó en español que estaba sentado sobre una pequeña pared fumando un cigarrillo de marihuana cuando vio que el otro implicado dejaba un vaso en el suelo. Le dijo que lo tenía que coger y echarlo a la papelera, pero como que se negó le dio un puñetazo.

Cuando las policías le pidieron que se identificara formalmente, les dio una riñonera diciéndoles que la buscaran ellas. En el interior de la bolsa, las policías no encontraron ninguna clase de documentación, localizando, eso sí, una bolsita con una sustancia que por sus características parecía ser marihuana.

Dado que seguía sin querer identificarse, ni siquiera verbalmente, las policías le indicaron que tenía la obligación y que podía estar incurriendo en un delito. En este momento incrementó su agresividad y una actitud amenazante hacia las agentes que, en varias ocasiones, tuvieron que hacer atrás para mantener la distancia de seguridad mínima y proteger su integridad. 

En vista de que el individuo seguía en su actitud, las agentes le detuvieron por un presunto delito de lesiones de menor gravedad y uno de desobediencia grave a las agentes de la autoridad. 
Después de ser trasladado y un golpe en el edificio de San Fernando, el detenido no tan solo no mejoró su actitud, sino que insultó gravemente a las policías y les lanzó un vaso de agua.

Finalmente, facilitó su nombre y mediante la base de datos de la Policía Nacional fue identificado como ciudadano belga de 29 años y residente en España.

Una vez finalizados todos los trámites del atestado fue presentado ante el juez de guardia.