Animales de compañía

La tenencia de  animales de compañía comporta unas pautas de conducta por parte de los propietarios para el bienestar de los animales y del resto de los ciudadanos. Por eso, hace falta respetar ciertas normas de convivencia, tanto en los espacios públicos como en sus domicilios.

• Los perros han de ser conducidos por los lugares públicos sujetos por una correa o cadena y tendrá que llevar el bozal, obligatorio para determinadas razas. Las correas extensibles, permiten una gran libertad de movimientos sin perder necesariamente el  control sobre el animal.
  
• Tienen que realizar sus necesidades en los lugares expresamente indicados. En los parques hay dispositivos especiales preparados. Utilice la calzada,  no deje nunca que las realicen  sobre las aceras y procure traer medios para retirarlas si fuera necesario.
  
• El animal no es culpable de sus acciones. Una buena educación hará que se adecue a los horarios y lugares que usted  como propietario le indique.
  
• Recuerde que un animal de compañía no es un juguete. No lo deje largos períodos de tiempo en su domicilio. Ni lo abandone en la vía pública. Estas acciones están castigadas por las Leyes y Ordenanzas Municipales. "Ordenanza para la inserción de los animales de compañía a la sociedad urbana"